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Lease

Lease o préstamo comercial: Cuál te conviene más

Cuando necesitas alternativas financieras para innovar en tu negocio es importante conocer tus opciones.

Comparar las distintas opciones te ayuda a escoger la mejor alternativa para tu negocio. En este artículo conocerás en qué se diferencian un préstamo comercial y un lease.

A manera de introducción, un préstamo comercial es una opción para financiar aquellos bienes necesarios para el funcionamiento o mejoramiento de una empresa.

Por otra parte, el leasing es una alternativa a la tradicional compra y financiamiento mediante préstamo de los bienes que requiere una empresa para su funcionamiento. Para conocer sobre ellos y cuál te conviene más, continúa leyendo nuestro artículo.

Qué es un lease

Un lease es un contrato mediante el cual el arrendador cede la utilización de un bien a un tercero o arrendatario, a cambio de pagos periódicos regulares para disponer del mencionado bien durante un plazo establecido.

Al final de dicho plazo el bien puede ser:

  1. Restituido al arrendador
  2. Adquirido por el arrendatario a un precio fijado de antemano. Este precio refleja el valor residual del bien en dicho momento
  3. Objeto de una renovación del contrato de leasing

Tipos de leasing

Existen diversos tipos de leasing, pero los dividiremos acorde a dos criterios: soluciones financieras y la cualidad de los bienes.

La primera diferenciación está enfocada en brindar soluciones financieras, y se divide el leasing en dos tipos:

Leasing Operativo

Se aproxima más al alquiler y es tradicionalmente realizado por empresas fabricantes o comercializadoras de bienes.

Leasing Financiero

Se asemeja más a la financiación de compra y a efectos contables la propiedad se transfiere al arrendador o lessor.

La segunda clasificación gira en torno a la cualidad del bien sujeto a leasing, en este sentido existen dos grupos:

Leasing de Bienes Muebles

Tales como vehículos, equipo informático y maquinaria.

Leasing de bienes inmuebles

Tales como edificios, almacenes y terrenos.

Principales diferencias entre un lease y un préstamo comercial

1. La corriente de pagos

Mientras que la compra vía préstamo usualmente requiere un desembolso inicial de entre el 20% y el 30% del bien a cargo de los fondos de la empresa, el leasing no suele requerir un pago inicial o, y en caso de que lo requiera, este es sustancialmente menor. De igual forma, los plazos de un leasing suelen ser menores que los de un préstamo.

Por último, en un préstamo no suele haber un pago final más elevado, es simplemente la cuota final, pero en el leasing podría haberlo si es que optamos por quedarnos con el bien al finalizar el contrato.

2. Aspecto fiscal

El leasing puede presentar ciertas ventajas fiscales para las empresas que están operando con beneficios, pues les permite deducir como gasto el importe íntegro de lo que pagan. En cambio, con un préstamo, solo podrían deducir los intereses.

El leasing operativo también evita el desembolso al inicio y pagar de una sola vez el IVU, ya que es la empresa de leasing quien lo realiza y lo repercute a la empresa arrendataria en cada cuota. Aunque según el tipo de leasing, los criterios aplicados pueden variar, podríamos decir que la amortización del bien se hace de forma más acelerada con el leasing. 

3. El impacto en el balance de tu empresa

La forma en que puedes contabilizar y reportar un leasing en los estados financieros dependerá de varios factores:

Principios contables de referencia utilizados. Los dos principales serán de acuerdo con el International Financial Reporting Standards (IFRS) y el United States Generally Accepted Accounting Principles (US GAAP).

Tipo de empresa. Por ejemplo, las empresas cotizadas en Estados Unidos deben reportar siguiendo el modelo del US GAAP. Además, según el volumen de facturación y otros conceptos, la contabilización de un lease puede reportarse de una manera distinta.

Importe, el plazo y la naturaleza de la operación. Por debajo de ciertos importes, un lease puede asignarse como operativo. La naturaleza del bien y de la empresa también pueden condicionar la forma de contabilización.

En los leasings operativos, el bien y su financiación se mantienen normalmente off-balance. Al comprar un bien con un préstamo este formará parte del activo de la empresa y el crédito con el que se financia la compra es parte del pasivo exigible. Por el contrario, con un leasing, sea operativo o financiero, la contabilización es distinta e impacta de forma diferente el perfil financiero de la empresa y los ratios de análisis financiero.

En general, aquellas empresas relativamente jóvenes y con ratios de estructura deuda/capital por encima del ideal pueden beneficiarse de un menor impacto de un leasing sobre el balance de la empresa.

4. Variaciones en la titularidad y libre disposición del bien

Mientras que al comprar un bien y financiarlo, la empresa adquiere la titularidad de este y puede disponer en plena capacidad, la titularidad del bien sujeto a leasing corresponde a la empresa de leasing, permitiéndole asignar ciertas limitaciones a las condiciones de uso de este. Por ejemplo, en el leasing de vehículos es habitual un límite de kilometraje anual o en un leasing de oficinas no se puede hacer reformas o modificaciones de la estructura sin acuerdo del propietario.

Por qué las empresas consideran los leases

Hay diversas razones por las que es oportuno considerar el leasing como alternativa de financiación para una empresa. Entre ellas se encuentran las siguientes:

La mayoría de las empresas y empresarios trabajan casi en exclusiva con bancos, hacer operaciones de financiación con otro tipo de empresas permite una diversificación y un incremento de las opciones de financiación.

La financiación vía leasing puede ser más ágil y flexible que la alternativa tradicional de financiación vía un banco. Esto se debe a que las opciones de la banca son típicamente entidades grandes, más rígidas y sometidas a exigente regulación.

El leasing puede conllevar mejoras en el cash flow de la empresa, especialmente su distribución temporal, considerando características técnicas como fiscales o de plazos.

Finalmente, ¿conviene un lease o un préstamo comercial?

Según discutido previamente, el préstamoes una opción tradicional conocida por financiar la compra de un bien. A partir de ese momento, la propiedad del bien pasa a la empresa y este puede ser colateral de la operación de financiación. Por otra parte, en el leasing el desembolso inicial puede ser nulo, la amortización es más rápida y el impacto en balance diferente, pues la propiedad del bien permanece con el lessor durante el periodo del contrato.

Atendiendo a las circunstancias de tu empresa y el bien a financiar, una operación de leasing podría no solo ser una alternativa adicional a las opciones típicas, sino también más ventajosa que un préstamo comercial. En Acrecent podemos asesorarte sobre cuál alternativa es más oportuna para tu caso.

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